miércoles, 1 de abril de 2009

REVOLUCIÓN EN EL PARQUE


Se juntaban todos los fines de semana, no sé cómo, pero empezaron a llegar por oleadas. Primero fueron los malabaristas, que transformaron el parque en un mágico campo de entrenamiento para sus magníficas levitaciones; luego empezaron a llegar los discípulos, y los malabaristas enseñaron sus trucos con una generosidad increible, mientras a su alrededor bailaban capoeira y los jóvenes se instalaban con mercaderías que vendían por monedas para comprar cerveza.

Esto fue la gota de que derramó el vaso; la policía se hizo presente con caballos y los vendedores y los bebedores tuvieron que irse. Sólo quedaron los malabaristas, los aprendices y uno que otro capoeira, porque ni el más fascista de los estados puede resistir su magia. Ahora la policía se ha sumado al público que los contempla... espero con ansias el día en que vea a un policía agarrar las clavas y comenzar a jugar... porque ese día la revolución habrá comenzado.

2 comentarios:

Alijodos dijo...

esto no sera como la revolucion cubaa no? alguno habra que le de al artilugio no creas...son unos mandaos no lo olvides...saludos..

ana dijo...

Por lo menos dejaron la magia.

Un besito muy fuerte.